Hace mucho que no escribo y esto tiene un motivo y se llama “Tesis Doctoral”. Si, estoy ya en las últimas fases de mi tesis, con lo que el tiempo se me ha reducido muchísimo para mi blog. Tengo mucho material para publicar, pero no tengo mucho tiempo para dedicarle. Es por eso por lo que intentaré sacar publicaciones periódicas, pero no puedo prometer que serán todas las semanas, por lo menos hasta que termine la escritura de la tesis, que estimo le quedará no más de un mes, espero. Aquí les dejo una, que tenía preparada hace tiempo, pero que no tenía tiempo de publicar. Espero les guste esta historia.
En esta reflexión les dejo una historia que nos habla de la importancia que tiene el ser prudente en nuestras apreciaciones, sabiendo tener paciencia para ver realmente lo que está ocurriendo, entendiendo que todo lo que sucede, bueno o malo, puede tener un desenlace mucho mejor, lo importante, dejarse llevar por la templanza y no por la excitación del momento que nos puede llevar a decir que es la peor de las decisiones o la mejor de las suertes. Aquí la historia:
Un día, el hijo de un viejo granjero dejó, por descuido, la verja del establo abierta. El único caballo que tenían escapó. Todos los vecinos vinieron a solidarizarse: “¡Qué mala suerte!”
Sin embargo, el anciano no se inmutó, solo dijo: “Puede ser, puede ser”.
Al día siguiente, el caballo volvió al establo y trajo consigo otros diez caballos salvajes que le siguieron desde las montañas. Ahora el granjero tenía once caballos y se había convertido en el hombre más rico del pueblo. Todos los vecinos fueron a visitarlo y le dijeron: “Parece que al final fue un golpe de suerte que el caballo se haya escapado”.
El anciano solo les respondió: “Puede ser, puede ser”.
Al día siguiente, mientras su hijo estaba intentando domar a uno de los caballos, cayó y se rompió una pierna. Al acercarse el invierno, sin la ayuda del hijo en la granja, el anciano tendría que afrontar grandes problemas. Los vecinos le dijeron: “En el fondo, fue un error. Ahora tienes los caballos, pero no tienes a tu hijo para que te ayude. Es algo terrible”.
El padre, en vez de lamentarse, respondió: “Puede ser, puede ser”.
Al día siguiente, el ejército llegó al pueblo y reclutó a todos los jóvenes para luchar en una guerra suicida. Era posible que ninguno de ellos regresara a casa. Sin embargo, como el hijo del granjero tenía una pierna rota, no lo reclutaron y se quedó a salvo en el hogar.
Una vez más, los vecinos le comentaron la buena suerte que había tenido. Nuevamente el granjero contestó: “Puede ser, puede ser”.
No nos dejemos llevar por la primera impresión de las cosas. En ocasiones hasta lo más terrible puede ser para un gran bien, o lo que vemos como una oportunidad puede ser la pero trampa. No juzguemos por las apariencias o las primeras impresiones, siempre tenemos que ser pacientes y tener fe, ya que lo mejor puede estar por venir, pero si aprendemos a apreciar el presente siempre tendremos la oportunidad de sorprendernos y a todos los malos momentos le podremos responder con un “puede ser, puede ser”.
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Tiempo siempre hay 🙂
Buen consejo, “seguro que será”…
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De nada… Me alegro que te guste.
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Me encanta, que cierto es.Reblogueo
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Reblogueó esto en Junco y Gacela.- Marijose y comentado:
Muy buen consejo de muy buenas letras
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De nada y muchas gracias por el reblogueo…
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a ti 🙂
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Me ha encantado… Nunca lo había visto así… Buena reflexión. Saludos.
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Me alegro que te diera una perspectiva diferente.
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Muy buena reflexión 👍
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Gracias
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Gran reflexión. La paciencia es una gran virtud.
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Si, virtud que tenemos que intentar todos cultivar
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Es verdad, nunca sabemos el porqué de las cosas, por eso hay que dar una oportunidad a cada situación. Las prisas siempre han sido malas consejeras, mejor sopesar pros y contras y con frecuencia llegaremos a conclusiones realmente inesperadas.
Gracias por la reflexión.
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De nada, y muchas gracias por tus palabras… igual ayudan a completar la reflexión.
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Los mejores deseos en tu tesis.
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Muchas gracias!!!
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Me gusta.
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Gracias
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Dios bendiga!
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El «puede ser» nunca termina hasta que lo hace la vida.
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Me permito linkar esta historia en un post de mi worpress, si me lo permites tu.
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Ese anónimo soy yo
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Claro que si, por favor. Por mi encantado
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¡Mucho ánimo con la tesis ya no te queda nada!
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Muchas gracias!!!!
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Siempre estamos a la espera de esa burbuja que se llama comentarios, y dentro de ella otra que es la percepción. Equivocados estamos. Buen texto. Saludos.
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efectivamente, es por esto que tenemos que liberarnos de ellos… muchas gracias.
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Gracias a tí.
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Genial! Lo comparto (:
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Muchas gracias!!!!
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Mucha suerte con tu tesis!!! Eso es lo primordial, no te apures por el blog tus lectores seguiremos aquí cuando ya tengas un poco más de tiempo.
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